Las aleaciones a base de níquel son materiales muy útiles para la fabricación de tubos de alta calidad. Una de las razones principales es que ofrecen una excelente resistencia a la corrosión tanto en aplicaciones acuosas como a altas temperaturas.
Las aleaciones de níquel son excelentes para los intercambiadores de calor en las industrias de procesamiento químico y nuclear. Se utilizan en tuberías de generadores de vapor en la industria de energía nuclear, en sistemas aeronáuticos de alta temperatura y en programas de extracción de petróleo y gas donde se requieren tuberías resistentes a la corrosión, la presión y la temperatura. Su resistencia a la corrosión también las hace útiles en equipos de desalinización.